Este año 2018, ha estado marcado por una primavera y un verano un poco fuera de lo normal en cuanto a climatología se refiere. Sin embargo, nuestro sistema de regadío y las especiales condiciones cercanas a El Moncayo y el río Ebro ofrecieron una situación favorable que permitió obtener racimos óptimos y de gran calidad. La vendimia comenzó con normalidad el 5 de septiembre, avanzando de forma escalonada según las variedades de uva que estaban maduras y los requisitos que exigimos para cada vino al que se destinan, para la vendimia hubo algunos días de lluvia que retrasaron el proceso, pero sin ninguna novedad que afectara la evolución. Un calendario bastante normal, en comparación con el año anterior, que comenzó dos semanas antes. El rendimiento de aprox. 6.500 kilogramos por hectárea garantizan vinos potentes, que luego permiten una buena crianza.

La primera y cuidadosa selección de la uva se hace en el viñedo. Al entrar en la bodega, la uva vuelve a pasar por una selección manual en mesa antes de ser macerada en frío a 5 ºC durante 24 horas. A continuación, la uva se despalilla, estruja y fermenta a una temperatura controlada de entre 25 y 28 ºC en pequeños toneles de roble francés, para después someterse a una larga maceración.

* 70% Syrah

* 30% Tempranillo